Una de las primeras personas con las que habló (por teléfono) Reinaldo Rueda apenas el Nacional llegó a Barranquilla fue con Xiomara Araújo, la esposa del profesor Alexis Mendoza, su oponente por el título esta noche.

Rueda el amor entre las familias de Reinaldo y Alexis. Alejandra y Carolina Rueda;  Isabella, Daniela y Alexis Mendoza junior, se quieren como hermanos.  Consideran al hoy entrenador rival como su segundo papá. “El profe rueda es como mi segundo papá”. Ya Reinaldo lo había dicho en Medellín antes de partir a la capital del Atlántico.

“La relación de nosotros, más que un tema de trabajo se convirtió en una familia, nuestros papás nos enseñaron a compartir los triunfos y las derrotas. Todos esos momentos complicados que vivimos permitieron que nosotras hoy estemos tan complicadas a la hora de hablar de la final. No somos capaces de decir Nacional va a ganar o Junior va a ganar, simplemente decimos que estamos en las manos de Dios y que pase lo que tenga que pasar”, dijo Isabella Mendoza a Zona Cero.

Alexis siguió su camino en solitario hace un año ante la propuesta de Junior, y, tras la salida de la dupla de la selección de Ecuador, con la jugaron el Mundial de Brasil, su segundo al hilo tras el de Sudáfrica con Honduras; Reinaldo, por su parte,  aterrizó en Nacional  6 meses después y hoy disputarán el título, pero el afecto entre ambos y sus familias sigue intacto.

 “Constantemente nos estamos comunicando no solo con Carolina que está en Canadá. También lo hacemos con Alejandra, la hija mayor del ‘profe’ Rueda y con su esposa que está en Cali. La comunicación de nosotros es constante. Nunca nos hemos separado por el tema de que ahora mi papá está como técnico y se separó del profe. La comunicación de nosotros ha sido la misma”.

Con tanto cariño en el medio,  no se atreven a vaticinar un ganador, menos a apostar. Que decidan al campeón Dios en el cielo  y en el campo los Viera, Vladimir y Ovelar; Armani, Macnelly y Duque.

“No somos capaces de apostarle, simplemente esperamos el mejor resultado. Ambos queremos lo mejor para cada uno, pero no sabemos qué es lo mejor porque ambos queremos ganar, pero no queremos afectar al otro. Entonces estamos en las manos de Dios, es lo único que decimos constantemente, que sea lo que Dios quiera.”

Los Rueda y los Mendoza: ejemplo de amor y respeto para dos aficiones polarizadas en un país que se encuentra cerca de la paz. El domingo, como en Honduras y Ecuador, seguramente celebrarán juntos, tras lamentar la derrota.